Apto: 13+
RR (Renuncia de Responsabilidad): Esta historia es pura ficción. The Gazette pertenece a PSCompany, con quien no tengo ninguna conexión, y las marcas registradas son propiedad de sus respectivos dueños. Ninguna parte de esta historia puede ser reproducida o reutilizada sin autorización.
Pledge Era un día como cualquier otro, no había por que pensar que seria distinto. Un miércoles soleado y caluroso como tantas mañanas.
El morocho se levanto pesadamente de la cama y estiro su cuerpo, últimamente no dormía bien y eso se reflejaba al otro día.
Busco entre su placard la ropa que usaría para ese día, tenia ensayo con la banda. Últimamente eran continuos ya que empezaría la gira para su fans club Heresy.
Tomo un baño rápido y se dispuso a salir hacia la compañía, pero en ese momento recibió un mensaje en su celular.
“no vengas” Sus ojos se abrieron con sorpresa, acaso leyó mal? No, eran esas palabras.
Respondió el mensaje con las manos temblorosas, en todos estos años jamás le habían dicho que no vaya a ensayar, o paso algo muy grave o… no quería ni pensarlo.
“que sucedió?” La respuesta llego 15 minutos después, una espera que fue casi una tortura para el morocho que caminaba por su casa como gato enjaulado, fumando nervioso y con una taza de café en la mano.
“Kai se volvió loco….esto se acabo” Esto es una broma, pensó, y sonriendo escribió.
“muy gracioso, Shima, vamos di la verdad”
“nos separamos Aoi. Es la verdad.” La taza se hizo pedazos en el suelo. Sus manos temblaban demasiado. Era verdad? No podía creerlo.
Lo primero que apunto a hacer fue ir a buscar a su líder, tuvo la remota idea de que estaría en su casa.
Manejo su auto como si fuera al mismo infierno, se paso todos los semáforos en rojo que encontró y supo muy bien que mínimo tendría que pagar 20 multas, pero en ese momento no importaba.
La banda no podía terminar, no podían tirar 10 años por la borda.
Llego al edificio donde vivía su baterista y líder. Antes de tocar a la puerta dudo, dudo en saber que diría, pero firme a sus convicciones lo hizo.
La imagen que se presento ante sus ojos no fue lo que el esperaba.
Kai estaba destruido, había llorado mucho por lo que sus ojos estaban rojos.
Aoi lo miro de pies a cabeza, no lo reconocía, incluso estaba fumando.
-Kai….que te paso?- dijo casi en un suspiro antes de parpadear varias veces para creer lo que veía.
-Me libero…- su voz fue cortante, seca, a tal punto que dolía.
-Libero? De que hablas?-
Kai entro al departamento dejando entrar al otro, pasaron hasta el living donde se sentaron en el sillón, uno al frente del otro. Había una botella de sake en la mesa ratona y un vaso.
-Se acabo Aoi, ya no resisto mas –dijo y tomo el vaso bebiendo el contenido.
-Pe..Pero que dices? Por que? –
-Creo que no lo entenderías…-
-No, si me lo explicas capaz que si…-dijo enojado
El castaño lo miro de reojo y suspiro.
-Tu crees que es fácil? Soy el líder de una banda de idiotas… Ruki y su complejo de “me creo mas que todo el mundo” –hizo con sus manos las comillas-
Reita y su mentalidad de “no quiero hacer nada, total soy el bajo y no tengo tanto trabajo” y ni hablar de Uruha, que si no vive en el spa esta en la peluquería…y tu… -lo miro-
que no sales de la computadora-
El morocho se sorprendió con cada palabra, acaso estaba enojado con las personalidades de sus amigos? Después de 10 años juntos?.
-Me estas jodiendo verdad? No me vengas con eso Kai… después de todo este tiempo te pones exquisito? –
-Sabia que no entenderías…-dijo bebiendo lo ultimo de su vaso
-Yo entiendo que estés cansado con tantos ensayos pero… nos conocemos todos, sabemos que somos complicados, recién te diste cuenta? –se río ante lo dicho, pero al ver la cara de su amigo sintió que estuvo muy fuera de lugar.
-Para ti es fácil decirlo, no cargas con las responsabilidades que yo-
-Kai! Somos una banda, estamos unidos! –se escucho la risa del castaño
-Unidos? A ver dime entonces, por que sos el único que vino a verme? –
Aoi no supo que decir…en verdad se sentía dolido por la actuación de sus compañeros.
-Y no des excusas para protegerlos, ya se como son las cosas –se levantó y sirvió mas de sake en su vaso.
-No deberías tomar tan temprano –
-No me jodas…estoy de duelo…kampai –dijo irónicamente.
La mirada que Kai le dio fue de dolor. Se le notaba a kilómetros que no fue lo mejor que decidio, tenia que arreglarlo… como sea.
El morocho se acerco a el y quito el vaso de sus manos.
-Kai basta! Tenemos que arreglar esto- vio como el otro se paro derepente y comenzó a gritar.
-Arreglar que? Estamos perdidos! No soportare más sus caprichos! No los soporto más! –lo tomo de la remera y lo atrajo hacia el –
en especial a ti….-
Su corazón latía a millones de segundos. Las palabras de su líder lo descolocaron.
-Por que? –dijo con miedo
-Por que…no sabes el dolor que me causa verte atrás de Uruha… cuando yo…-bajo la mirada ocultando su llanto-
-Tu que? –
-Cuando yo te eh amado durante 10 años…-
La respiración se le cortó, el cuerpo le tembló, podía jurar que lo único que lo mantenía en pie era el agarre de Kai a su ropa.
Hubo un silencio, un silencio incomodo. Kai sollozaba lento y pausado. Luego ,Aoi ,sintió que el agarre era menos y que lo soltó completamente.
-Vete…-dijo Kai con la voz débil
Luego de eso Kai entro a su habitación, sin prender la luz, se arrodillo al borde de la cama y lloro en silencio. Pero luego sintió que unos bazos lo alzaban y lo abrazaban calidamente.
Aunque sabia que se iba a arrepentir, correspondió y dejo que el morocho lo consolara en sus brazos.
-Te dije que te vayas…-dijo en su hombro, sin soltarlo.
El otro solo negó con su cabeza… no lo dejaría solo.
Deshizo el abrazo tomándolo del rostro y mirándolo a los ojos le dijo…
-No estas solo…yo…te amo Kai-
El castaño lo empujo de el y con lagrimas en los ojos le recrimino.
-No me mientas Shiroyama! Acaso crees que soy estupido! Vete…vete!!-
-Te digo la verdad…te amo Kai…déjame demostrártelo…-
Sin darle tiempo a reaccionar, Aoi lo tomo del rostro y lo beso.
Kai sintió que en ese momento moriría, correspondió a ese beso, abrazándolo y juntando sus pechos dejando de lado el enojo y el resentimiento.
Aoi, sin cortar el beso, acaricio su mejilla, mientras que con la otra mano bajo el cierre de la campera que llevaba. Tomo la mano del castaño y la puso en su pecho.
-Es tuyo…-dijo sobre sus labios, sintiendo como la mano de su líder presionó la remera en el lugar donde estaba posicionada, su corazón le pertenecía ahora.
Kai sonrío y le quito la campera y seguido su propia remera dejando al descubierto la piel de su pecho el cual el otro acaricio con suavidad, demostrando un cariño que pocas veces era de dar.
El castaño lo sentó el cama, posicionándose sobre el, enredando sus piernas en la cintura del morocho, quitándole con suavidad la remera.
Aoi lo miro a los ojos y repartió pequeños besos en su rostro, recorriendo las bellas facciones de su amado. Con delicadeza lo recostó en la cama y acaricio su espalda haciendo un recorrido desde su cuello hasta su cintura, lentamente, como si estuviera dibujando la más hermosa obra de arte.
Suspiro en sus labios, los cuales besaba con ternura, al sentir que la piel ajena era suave al tacto y se erizaba ante el contacto de las yemas de sus dedos.
Kai suspiro sintiéndose satisfecho con aquellas caricias. Nunca en su vida había conocido aquellas sensaciones que superaban a la satisfacción sexual. Lo tomo del mentón, profundizando el beso, pero sin dejar de lado la ternura.
Recorrió, también con la yema de sus dedos, el pecho del morocho sintiendo la calidez y suavidad que le brindaban, hasta llegar a su Jean, habiendo el cierre lentamente.
El morocho mordió sus propios labios al sentir las caricias recibidas sin dejar de mirar esos ojos brillantes, esa mirada que confirmaba tantos años de amor. Cerró los ojos dejándose hacer mientras que acariciaba su rostro y le delineaba los labios sin intención más que admirar la belleza que tenia el privilegio de ver.
-Aoi…-se acerco a su oído y pego sus labios a el
–hazme tuyo…- beso su cuello lentamente, con delicadeza mientras que aplico mas fuerza al agarre en sus piernas.
Los ojos del morocho brillaron al escuchar esas palabras y lo beso tierno. Iba a poder amarlo finalmente. Quito con cuidado las prendas que el otro llevaba y acaricio sus piernas con la misma dulzura que el resto de su cuerpo, su intención era grabar cada rincón del hermoso cuerpo del hombre que amaba. Llevo sus propios dedos a sus labios y con los ojos cerrados los lubrico lo suficiente, se pociciono sobre el y lo beso
–Te amo… - dijo en un suspiro sobre sus labios mientras que introdujo su primer dedo en el interior del otro.
Kai lo vio a los ojos y al notar su mirada sintió que podía enamorarse no una, sino miles de veces mas. Sonrío al sentir la delicadeza con la que estaba siendo tratado y correspondió a aquel beso, mordiéndole el labio con suavidad.
Sintió la intromisión en su entrada y arqueo la espalda, abrazándolo y accidentalmente jadeo en su oído.
Movió su dedo en el interior lentamente sin apuro alguno ni intención de que sea un movimiento lacivo, sino tierno y delicado, como acariciar el pétalo de una flor. Lo beso, tranquilizando los temores del castaño y haciéndole saber que no le haría daño alguno, introdujo otro de sus dedos y lo miro, controlando que este bien.
El castaño arqueo más la espalda y su respiración se sentía mas agitada. Suspiraba al recibir cada “embestida”. Lo miro a los ojos una vez más y le sonrío moviendo su cintura.
-Hazlo…ya…-
Aoi sonrío y beso la comisura de sus labios, retirando sus dedos. De acomodo lo suficiente para que su miembro ocupe el lugar en el cual estaba antes y sin ninguna intención de dañarlo, lo penetro suavemente, sin dejar de besar su cuello.
Kai, gimió fuerte su nombre, sintiendo aquella penetración que lo estaba enloqueciendo, sentir el amor de Aoi lo llenaba de felicidad. Una de sus manos subió y enredo sus dedos en el cabello negro del otro, suspirando varias veces. Después de unos segundos, movió lentamente su cintura indicándole que ya podía moverse.
Con cuidado, el mayor, lo abrazo de la cintura dejando que su antebrazo ocupara gran parte de la misma haciendo soporte y lo levantó leve para que el dolor sea menos, aunque no planeaba ser rudo. Se acerco a sus labios y solamente los rozaba , los sentía abrir y cerrarse mientras se movía lento y profundo en el interior del otro. Un simple contacto que lo llevaba a la locura con un simple suspiro que le daba el hombre que amaba.
Kai, se dejo hacer y aferro mas sus piernas a la cintura contraria, si es que era posible, moviéndose lentamente, al ritmo de las embestidas recibidas. Estiro su cabeza hacia atrás, completamente entregado al placer y a las sensaciones que le estaba dando el morocho.
-Te amo…-dijo casi inaudible, ya que los jadeos y leves gemidos que daba no lo dejaban articular algo coherente.
Aoi, cerró los ojos fuertes y mordió su labio inferior ya que el placer era mas intenso de lo que pensó, ni las relaciones mas osadas de una noche se comparaba con estar con alguien a quien amaba de verdad. Al escuchar la débil confesión del otro, sonrío y beso tierno la extensión de su cuello mientras que acariciaba su cabello y se movía un poco más rápido y más profundo, sin perder la delicadeza ni el amor.
Le acaricio la espalda, sin dejar de mirarlo y contemplo aquella expresión. Aoi era completamente hermoso y se sentía feliz de saber que le pertenecía y que al fin era suyo.
-Quiero mas…Aoi… márcame…- El morocho sonrío de lado y miro con dulzura esos labios que tanto amaba, pero no estaba en sus planes marcarlo como suyo dejando una marca en su piel, al contrario, bajo a su pecho y beso con ternura la parte donde pertenecía el lugar del corazón y en un suspiro dijo…
-Eres mío…-Kai, gimió leve al sentir esos labios que tanto deseaba rozar su piel, cerro los ojos y arqueo la espalda, gimiendo alto al sentir que el miembro del oto tocaba aquel punto que hacia perder su cordura.
Aoi lo levanto leve y junto sus frentes, preparándose para el momento que tanto esperaba, mirándolo fijo y suspirando en sus labios dijo…
-Te amo…te amo…aaahhh te amo…-Sus movimientos fueron mas profundos y rápidos dejándole paso al orgasmo el cual revelo en un gemido que reprimió en los labios de su líder.
Kai se mordió el labio al escuchar esas dos palabras que tanto tiempo espero. Esas palabras que lo embriagaban de felicidad y que en ese mismo instante se volvieron su vida…
-Yo también te amo…-lo beso con deseo y gimió sobre sus labios llegando al orgasmo.
Aoi lo recostó nuevamente y salio de su interior lento, aun respirando agitado. Se acostó a su lado y lo abrazo, besando su frente y su cabello, secando el sudor que produjo ese hermoso ser que tanto amaba, deseaba y nunca dejaría de amar. Lo acuno en sus brazos y lo cubrió con la sabana, acariciando su espalda.
Ambos de miraron con ternura. No había más nada que confirmar. Tantos años callando eso que sentían se compenso en ese momento.
-No nos dejes…-dijo Aoi, besando su frente.
-Aoi…-
-Por favor Kai…-lo tomo del rostro y lo miro
–ahora me tienes ami…-El castaño suspiro y lo miro, buscando ese “por que” para seguir.
En su mente, vinieron imágenes de toda su carrera. Shows, pv, grabaciones, discos, giras, fans, éxitos, amigos, familia…el.
Sonrío al verlo y por fin tenerlo entre sus brazos.
-Esta bien…the GazettE no morirá- La sonrisa de su líder fue mas hermosa que otras veces, le acaricio la mejilla y sonriendo le pregunto.
-Lo prometes?...-
-Es una promesa…- Fin .
Espero les guste! quiero agradecer a una musa inspiradora...ella sabe quien es... 
![[FF] Pledge [oneshot] Icon_minitime](https://2img.net/i/fa/icon_minitime.gif){kind=icon}
Mar Jul 24, 2012 10:02 pm
